La duración del proceso de divorcio

 Aunque algunas personas pasan por muchos divorcios a lo largo de sus vidas, una persona que está lidiando con su primer divorcio puede sentirse perdida y confundida por las pautas legales y las restricciones de todo el proceso. Las personas pueden divorciarse pensando que sus posesiones se dividirán por la mitad con sus cónyuges y que cada parte pronto podrá seguir adelante con sus nuevas vidas. Sin embargo, las cosas no siempre son tan sencillas y muchas personas se sorprenden al saber que algunos divorcios pueden durar años.

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¿Por qué algunos divorcios se finalizan con relativa rapidez, mientras que otros se prolongan durante varios meses o años? Cada divorcio en particular tiene su propia línea de tiempo debido a los factores particulares involucrados en el caso. Algunos divorcios avanzan rápidamente porque los cónyuges tienen pocos bienes compartidos, no tienen hijos y llegan fácilmente a acuerdos sobre la división de bienes. Sin embargo, otros divorcios son más complicados y requieren mucho más tiempo para resolverse.

Entonces, ¿cuánto durarán sus procedimientos de divorcio? La respuesta puede variar según las situaciones particulares que influyen en su divorcio. Su divorcio puede demorar la mitad que el de un amigo o puede demorar tres veces más. Los diferentes factores que determinan la duración de un divorcio pueden incluir:

Niños. Las parejas que tienen hijos suelen tardar mucho en finalizar su divorcio. Esto se debe a que las parejas a menudo discuten sobre quién debería tener la custodia de los niños. Incluso si se establece la custodia, pueden surgir más discusiones sobre los derechos y los tiempos de visita. La situación se complica aún más si uno de los cónyuges quiere mudarse, si hay varios hijos o si los hijos tienen padres biológicos diferentes. Las parejas que no tienen hijos o cuyos hijos son adultos y 

están fuera de casa a menudo pueden finalizar su divorcio mucho más rápido que las que tienen hijos.
Propiedad compartida. Las parejas a menudo tienen disputas sobre la propiedad de la propiedad, especialmente cuando los artículos poseen un alto valor financiero o sentimental. Los cónyuges que se divorcian pueden discutir sobre quién se queda con la casa, quién se queda con el automóvil o quién se queda con el querido perro de la familia. Estos argumentos pueden prolongarse con el tiempo. 

Además, dado que cada propiedad compartida debe dividirse, aquellos que poseen grandes cantidades de propiedad a menudo experimentan largos divorcios ya que toda la propiedad debe dividirse.
Antagonismo. Si los cónyuges discuten continuamente en lugar de discutir profesionalmente su situación de divorcio, ambas partes sufren a medida que el proceso se extiende con el tiempo. Aquellos que se esfuerzan por mantener sus conversaciones sobre el divorcio de forma educada y profesional a menudo se enfrentan a un divorcio más breve y niveles más bajos de estrés.